La Bugambilia
Es una familia de arbustos espinosos trepadores procedente de Brasil. Lo mas característico de esta especie son sus brácteas de color intenso que se producen junto a las flores y que en realidad no son ni hojas ni flores. Este intenso color hace que sea muy apreciada en los veranos de nuestros jardines mediterráneos.
Como arbusto tropical crece bien cuando tiene suficiente calor, y los inviernos en nuestras latitudes deja de florecer y tira gran cantidad de hojas. La bugambilia se daña con las heladas llegando incluso a morir, por lo que se ha de cultivar en invernadero durente invierno si vivimos en lugares fríos, o al menos ponerla al resguardo de heladas bajo algún tejado orientado al sur para que a la vez entre el sol.
Una característica a tener en cuenta para su utilización como bonsái es que sus ramas lignifican con suma rapidez y parten al intentar doblarlas. El cultivo como bonsái debe ir orientado a obtener una ramificación corta y llena de flores.
REPRODUCCIÓN
Se reproduce fácilmente por estaca, o por acodo. Usaremos trozo de rama de al menos 1 cm de diámetroy unos 10cm de longitud. Enraíza con facilidad a principios de primavera sobre un sustrato aireado.
Asímismo es fácil su recuperación siempre que podemos su parte aérea ya que no podremos utilizar debido a la imposibilidad de doblar las ramas gruesas. Aprovecharemos para podar todas las ramas obteniendo algo de conicidad y las raíces verticales para tener la base lo mas plana posible respetando alguna raicilla fina. Colocado en exterior a pleno sol a principios de primavera comenzará a brotar en unos dos meses.
(Trabajo de raíces gruesas en recuperación de bugambilia)
RIEGO Y SITUACION
Demasida humedad en las raíces suele causar la caida de las flores, y hasta de las hojas, por ello usaremos siempre un sustrato ligero con buen drenaje para evitar encharcamiento y regaremos cuando la superfície se seque.
En caso de mucho calor se debe de sombrear en las horas de mediodía y observaremos que se seca mas a menudo cuando está en plena floración llegando a necesitar hasta tres riegos al día. La deshidratación también provoca que se sequen las flores.
En invierno seguimos con la misma práctica, regamos cuando se seque la superfície.
No mojar las flores.
Debe situarse a pleno sol excepto en épocas de calor extremo en las que se debe sombrear a mediodía para evitar la pérdida prematura de las flores. En climas como el mediterráneo algunas variedades de bugambilia suelen perder casi la totalidad de las hojas a finales del invierno.
ABONADO
Para un crecimiento saludable y vigoroso necesita abonar durante su época de crecimiento cada 15 dias con abono líquido equilibrado o sólido para bonsái siguiendo las instrucciones del fabricante. En la época de floración usar si es posible un abono bajo en nitrógeno.
Es sensible a la clorosis por lo que añadiremos quelato férrico dos veces al año.
Dejar de abonar en invierno.
TRASPLANTE
A principios de primavera cada dos a cuatro años con recorte de raíces que también son bastante quebradizas. El sustrato ha de ser bien aireado recomendado una mezcla al 50% de akadama y pómice ó volcánica siempre libre de polvo y grano fino.
PODA, ALAMBRE Y PINZADO
La poda de ramas sobrantes la realizaremos a principio de primavera aprovechando el trasplante o la pérdida de hojas. Si obtenemos una bugambilia de vivero, demasiado altas casi siempre, procederemos a realizar una poda drástica en esta misma época.
El pinzado en esta especie se usa para dar forma a nuestro bonsái junto con el alambrado. La mejor manera de dar forma a una bugambilia consiste en alambrar la nueva brotación cuando tiene unos 10 a 15 cm pinzando la punta. Si la tenemos fuerte en unos 10 ó 15 dias habrá sacado nuevas yemas y la rama estará lignificada y el alambre clavándose por lo que tendremos que retirarlo quedando la ramita en su posición.
Si partímos de material recuperado o hemos hecho una poda drástica este es el camino mas adecuado para formar un bonsái de bugambilia.
El defoliado de una rama produce una abundante ramificación pero debilita y retrasa mucho el crecimiento por lo que no lo recomiendo en vista del resultado del pinzado de la punta.
(Resultado en el quinto año desde la recuperación. Para ver el trabajo completo hasta la fecha aqui)
FLORACIÓN
El objetivo de un bonsái de bugambilia es indudablementa la floración. Como ya he dicho las hojas de color en realidad no forman parte de las flores, sino que las rodean. Las flores en realidad son pequeñas, blancas y aparecen habitualmente de tres en tres. Sea como sea, el estupendo colorido que nos ofrece desde la primavera y sobre todo al principio del verano, se ve habitualmente truncado con los calores fuertes del verano, volviéndose marrones y cayendo con facilidad. En este momento es aconsejable cortar por el tallo mas cercano todos los conjuntos florales. Ésta práctica estimulará la emisión de nuevas flores que , en este caso, se prolongará hasta entrado el invierno si se cultiva en invernadero.
Retirar los pedúnculos florales con tijeras en cuanto se secan.
RESUMEN
La bugambilia es una especie muy fácil de cultivar si se siguen unas normas básicas, que compensará con su color la dedicación que le demos. Muy recomendable tener una en vuestra colección.